0%

Bailando En Un Mar Legendario – Novela Capítulo 35

Capítulo de novela - 107 párrafos

Entonces Orión cambió el tema de conversación.

—¿Estás contando el ganado como querías?

Por eso Kira perdió la oportunidad de indagar un poco más en sus palabras. Sacó la tablilla del bolso y se la mostró.

—Sí, no me perdí de nada. Veinticuatro pollos, dieciocho gansos, trece cabras...

—Quedan ovejas y vacas. Tenemos que ir a las afueras reales para verlas. ¿Tienes hambre?

—Un poco.

Tan pronto dijo aquello, pudo escuchar su estómago rugir. Entonces les tocó a los panes de arroz traídos de casa desempeñar un papel activo.

Kira se sintió rara al comer sobre un burro. Mordió el pan partido por la mitad después de colocar dentro un poco del queso que había recibido.

Orión se comió su propio pan después de dar unos pocos pasos, luego rompió un huevo y se lo bebió. Le ofreció a Kira uno, pero ella se negó. No sabía mucho al respecto, pero no tenía la confianza para comer huevo crudo.

Los caminos que daban al mar estaban abarrotados, pero los que daban hacia las afueras estaban relativamente despejados. Cuando cruzaron el portón de la ciudad, el pavimento desapareció y apareció un camino de tierra.

A partir de allí, el camino atravesaba colinas. Orión dijo que hasta que llegaran a otras ciudades costeras, sólo habrían escasos pueblos mineros y granjas. También dijo que todas las praderas que se podían observar de camino eran tierras que alimentaban al ganado.

Fueron a comprobar las ovejas primero, quienes eran cuidadas por pastores. Eran expertos en pastorear todas las ovejas en esta área, y lideraban un gran ejército de más de cien con solo cinco personas. Entre ellas, Orión tenía treinta y dos ovejas.

Kira se sentó en la hierba y observó atentamente cómo pastaban las ovejas. Estas tenían un cordón azul con cascabeles atados alrededor del cuello para marcar a su dueño.

Desde allí, pudo escuchar la conversación entre Orión y un pastor.

—¿Siempre fueron tantas?

—Han nacido muchos corderos. Las cosas han ido muy bien este año. Pensé que sería mejor criarlos bien en vez de venderlos en cualquier parte.

—Es tu decisión, un pastor sabrá mejor que yo. Solo asegúrate de dejar ir al ganado que tiene más tiempo cuando llegue el momento...

Kira miró fijamente a los corderos durante mucho tiempo mientras escuchaba la conversación lejana. Entonces metió una mano bajo su capa y sintió uno de sus cuernos. Eran suaves. También sintió el cuerno de un cordero que mascaba hierba. Eran ásperos.

Ambos tenían cuernos, pero la textura era diferente. Kira estaba asombrada. Entonces el cordero se acercó y frotó su cabeza contra ella.

—¿Eh? ¿Quieres jugar conmigo?

Kira solo estaba acostumbrada a los pájaros en los acantilados y a las ratas en los nichos. Este extraño animal le mostró su encantadora inocencia, por lo que el corazón de Kira se conmovió. Estiró sus brazos y abrazó al cordero, pero el pequeño animal se quejó de que era molesto. Entonces saltó lejos.

Sintiéndose decepcionada, Kira lo miró sin comprender. Orión, que había estado observando desde el otro lado todo el tiempo, se acercó a ella. Era malo, pues estaba conteniendo descaradamente su risa.

—La charla ha terminado. Él no necesita una nueva madre.

—Solo estaba tratando de abrazarlo.

Ante las palabras hoscas, el pastor que estaba examinando el rebaño rió.

—Artemisa protege tanto a los animales salvajes como al ganado, ¿verdad? Ese pequeño seguramente crecerá bien ahora que fue abrazado por una diosa. Lord Orionis, la próxima vez que venga, debe traer consigo a su propio pequeñ…

—¡Vamos! ¡El sol se pone mientras hablas tonterías!

Orión de repente cortó las palabras del pastor con una voz fuerte y tomó la mano de Kira. Kira inintencionalmente volvió a montar sobre el burro. Sintió tristeza por la actitud del cordero.

—Fue lindo.

—Está oscureciendo, ¿quieres ir a casa? El próximo rebaño es el de las vacas. Los terneros también son lindos, así que ten paciencia.

—Los terneros deben ser más grandes. Puede que sean lindos, pero...

Pero la oportunidad de ver a las vacas en persona fue tentadora. Después de cambiar de opinión, Kira volvió a sacar la tablilla y anotó el número de ovejas. Ocho machos, quince hembras y nueve corderos. Cuando los pequeñines crecieran, el número volvería a aumentar.

Orión llevó las riendas del burro al prado justo frente a ellos. Antes de darse cuenta, solo quedaba una casa.

Tenía razón hasta cierto punto al decir que nadie lo engañaría. Como resultado de verificar uno por uno, el número de animales por cada casa era exacto. Cada uno de los cuidadores de los animales fueron honestos al contarles cuando el rebaño mejoró o decayó.

Tal como se dijo, nadie se atrevería a cometer un fraude contra un gigante como Orión. El ganado a veces daba a luz a más crías, y unos pocos morían. Si los números eran demasiado altos, se vendían unos cuantos al mercado y parte de las ganancias ciertamente eran usadas para pagar la cuota de alquiler. Gracias a eso, los números encajan bastante bien en comparación con la laxa gestión del hogar.

«Si realizara un seguimiento de las tarifas de alquiler y los artículos provenientes del ganado que ingresan a casa, las ganancias serían mucho más notables»

Kira tuvo una nueva resolución. Convirtamos esto en un libro mayor cuando regresemos a casa.

Por otro lado, se sintió un poco extraña.

Kira recordó las circunstancias de las casas que habían visitado. En general, todas estaban en mal estado. Había muchas casas por las que pasaron donde ella se preguntaba cómo se ganarían la vida sin el ganado prestado.

Había escuchado que el mundo exterior estaba lleno de arrendadores que estafaban a los arrendatarios con precios altos, pero todas estas personas que conoció el día de hoy parecían muy agradecidas con Orión por prestar sus animales a un bajo precio.

«Este hombre está ayudando a otros de nuevo, fingiendo no estarlo haciendo.»

Por un lado, era divertido, pero por otro lado, su corazón se enfrió.

Después de todo, ella era una de las muchas cargas de Orión. No podía pasar por alto las circunstancias en las que se encontraba, así que este decidió hacerle un favor.

Gracias a eso, Kira se sentía aliviada de vivir en su casa, evitando así la amenaza constantemente que tendría de sobrevivir por su cuenta en una tierra desconocida.

El desafío al cual se enfrentaba Kira era pasar un año a salvo en su hogar. Sin embargo, si se aferraba a Orión incluso después de eso, sería un problema.

Después de esto, tendría que encontrar su propio camino.

«En ese momento, yo también debería poder hacer mi parte»

Mientras pensaba en ello, un granero hecho de madera apareció del otro lado. En lugar de dirigirse directamente al granero, Orión llamó a la puerta de una casa cercana.

El dueño de la casa, un ganadero, abrió la puerta. Sin embargo, tan pronto como se encontró con los ojos de Orión, arrugó la frente por un instante. Sin embargo, justo cuando Kira pensó asegurarse que aquello no había sido solo una ilusión, éste cambió de expresión por completo y saludó exageradamente.

—¿No es este Lord Orionis? Este diminuto ganadero está muy sorprendido de verlo aquí repentinamente.

Orión arqueó las cejas ante esa actitud.

—¿Hay alguna razón por la que no debería estar aquí?

—Oh, no. De ninguna manera. Pero esa mujer que viene en el burro…

El ganadero reconoció a Kira y se inclinó.

—Los rumores son ciertos. ¡Es un gran honor! ¡Sí, debería felicitarlos! Pasen, por favor.

Orión también notó el comportamiento extraño del ganadero.

Mientras el ganadero abría la puerta con un brazo, Orión apoyó todo su cuerpo contra la puerta mientras se cruzaba de brazos. Dijo en voz alta.

—Recibimos mucha hospitalidad en las casas por las que pasamos antes de llegar hasta aquí. Ya hemos almorzado y cenado, así que no hay necesidad de servir algo deliberadamente. Solo estoy aquí para mostrarle a esta mujer el ganado.

Entonces, el ganadero trató de borrar su amarga expresión y forzó una sonrisa.

—Las vacas están bien, por supuesto, así que no se preocupen y coman un aperitivo primero dentro. Vamos, vamos...

—No, empezaremos viendo el ganado.

Orión cortó sus palabras. El ganadero se estremeció visiblemente. Entonces Orión entrecerró los ojos.

—Te confié mi ganado porque eres el ganadero más grande de la zona. No creo que seamos muy cercanos, así que ¿por qué tanto halago?

—¿A qué se refiere con halago? Por cierto, ¿por qué está tan enojado? Yo solo…

Orión se quitó la capa. Era simplemente una acción para corregir su apariencia. Sin embargo, produjo el efecto de hacer que la espada que llevaba en el cinturón se apreciara en su totalidad.

—¿Eran veinte? Mi memoria no es tan mala. Veré con mis propios ojos cuántas hay y cómo están de salud. Ve a abrir la puerta del granero.

Como si hubiera perdido las palabras, el ganadero se tambaleó sin poder tomar la delantera.

Pronto se decidió por algo y se inclinó.

—Lord Orionis, por favor permítame aclarar el malentendido. Sólo quería felicitarlo primero y luego procedería a informarle de la situación actual. No tenía otra intención.

¿Era tan bueno que ahora Kira viviera en la casa de Orión? Fue cuando Kira se preguntaba aquello. El ganadero se aclaró la voz con una tos falsa y dijo lo siguiente.

—Se lo diré de antemano para que lo compruebe usted mismo. Es desafortunado pero... ¿No fue este invierno más seco de lo habitual? Mientras el Lord estaba fuera de la isla, las vacas enfermaron y cinco de ellas murieron.

Una cuarta parte de las veinte vacas se perdieron. Kira trató de calcular la cantidad de dinero perdido, pero luego se dio cuenta de que no sabía los precios del ganado y renunció a ello.

Aún así, fue impactante. A comparación de otro tipo de ganado, la pérdida de incluso una vaca era un gran golpe. Las vacas eran obedientes, tenían una excelente fuerza de trabajo y su valor provenía de su carne y piel. En algunas regiones, las vacas todavía se usaban como sustituto del dinero.

A diferencia de Kira, que estaba aturdida, Orión no mostró gran cambio en su expresión. Preguntó tranquilamente el ganadero.

—El clima mató a las vacas.

—La vida y la muerte están todas bajo el control de Hades, así que no pude evitarlo.

Como si pensara que su absurda justificación estaba funcionando, el tono del ganadero gradualmente se volvió más y más confiado.

—No sé nada más, pero es inevitable que enferme el ganado. Por supuesto, no había forma de que yo pudiera recuperarme fácilmente de la terrible tristeza que me embargó después de sus pérdidas. Estaba pensando en cuándo avisarle, pero es bueno que usted haya venido hasta aquí. Calcularé el monto de la compensación y se lo daré. Sí, haré que alguien le envíe el pago en los próximos días.

Al final, estaba tratando de negociar presentando una alternativa.

Kira quedó anonadada por su comportamiento. Incluso ella sabía que el ganadero estaba jugando una mala pasada. Estaba poniendo excusas por la pérdida de las cinco vacas.

¿Las vacas realmente se habían enfermado? No estaba segura. Quizás éste hombre se había deshecho de ellas por alguna razón. Pero ni siquiera pudo preguntar qué pasó realmente con las vacas.

En resumen, el ganadero estaba seguro que confiarían en su versión dada la ausencia de pruebas. Kira, que fue testigo de la maldad del mundo exterior por primera vez, chasqueó la lengua ante el descaro. Orión se dio la vuelta hacia él y ella se preguntó qué iba a hacer.

Entonces bajó la barbilla y torció los labios. Era una sonrisa realmente siniestra.

El ganadero, como si sintiera una instintiva sensación de crisis, esbozó una sonrisa aún más forzada.

—¿No sería eso suficiente para consolar un corazón roto…?

Kira tardó un momento en entender la situación frente a ella. Orión, que se movió como un relámpago, de repente estiró el brazo, y el ganadero fue agarrado por el cuello y levantado en el aire. Ambas piernas revolotearon contra la pared.

—¡Ugh, esto, qué clase de…!

—...Queriendo engañarme de esta manera. He oído hablar de vacas que mueren bajo el sol abrasador, pero nunca de una vaca que muera por un poco de sequía en el invierno. También es la primera vez que se reporta algo al respecto acerca de una enfermedad. ¿Piensas que nací ayer? ¿eh?

—¡Si sigue con esto presentaré una queja ante el Senado...!

—Vamos, inténtalo. Ni siquiera estamos cerca de todos modos, así que tengamos una pequeña charla mientras tanto. Ni siquiera le temo al santuario como para que creas que temblaré ante el Senado.

Orión sacudió al hombre. Comparado con su comportamiento violento, su voz era extremadamente fría.

—Te la pondré fácil, enano. Sé honesto. Debe de haber una buena razón para qué cinco vacas esten desaparecidas a la vez, cinco de mi rebaño. No creo que sea aceptable que pongas excusas poco creíbles en lugar de postrarte en el suelo pidiendo perdón como un perro. 

—E-Entonces, ¿qué es para usted ser honesto? ¡Estoy diciéndole la verdad! Sigue acusándome de mentir, pero ¿acaso tiene pruebas?

El ganadero se veía realmente enojado con Orión.

Kira estaba estupefacta. ¿Por qué este hombre insistía tan desesperadamente?  Al mismo tiempo que la embargaba la curiosidad, surgió la ira. ¿Dónde rayos estaban ahora esas cinco pobres vacas?

En ese momento, se le ocurrió una forma de asustar al hombre.

Telepatía. Así como Loxias podía transmitir un mensaje a través del agua, la telepatía podría enviarse incluso si la persona promedio fuera su oponente. Kira gritó con ira usando su telequinesis.

[Deja de mentir. ¡He leído tu mente!]

De hecho, lo adivinó basándose en la expresión y forma de actuar del hombre.

El ganadero se enderezó, preso del pánico. Sus ojos se encontraron con los de Kira. Kira volvió a gritar en su cabeza sin siquiera abrir la boca.

[¿Vas a ocultar lo obvio hasta el final? ¡Date prisa y confiesa antes de hacerlo enojar más!]

La voz que resonaba en su cabeza casi volvió loco al ganadero. Dejó escapar un gemido extraño y gritó una oración a Artemisa por su maldad. En el momento en que Orión miró a Kira al darse cuenta de la repentina actitud inusual del hombre, el ganadero finalmente confesó.

—¡Ah, en realidad fue Creta! ¡Los cretenses llegaron hasta aquí no hace mucho tiempo buscando vacas! ¡Se las vendí porque dijeron que me pagarían tres veces el precio de mercado!

Traducción: Claire

Si te gustó, Puedes apoyarnos aquí ~  [http://www.paypal.com/paypalme/MangoNovelas ]

Tambien contamos con página de facebook ~ [https://www.facebook.com/MangoNovelas ]

Tambien visítanos en TikTok ~ [https://www.tiktok.com/@mangonovelas ]

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Inicio Detalle del manga