Me Convertí En La Suegra De La Triste Protagonista Femenina – Novela Capítulo 3

[Traductor: P꒪˙꒳˙꒪]

Capítulo 03

"¿Qué? ¿Qué dijiste? ¿Dijiste que el impuesto por el regalo ya fue pagado?"

Liliana Locke. La única hija de la familia ducal Locke, de ilustre linaje noble. Pensó que, después de haber presenciado los comportamientos indecentes de los nobles de alto rango en innumerables ocasiones como dama, ya no se sorprendería fácilmente por nada...

Pero, aparentemente, eso no fue más que una ilusión suya. '¿Qué demonios está pasando?'

Liliana olvidó su dignidad como dama y se quedó allí, boquiabierta. El cheque de 10 mil millones de shillings que recibió de Vanessa. Solo había venido a declarar el obsequio, pero se quedó atónita ante las insólitas palabras del funcionario fiscal.

"Sí, señorita Locke. No solo se declaró el ingreso, sino que también se pagaron en su totalidad los 5 mil millones y 34.1 millones de shillings correspondientes al impuesto sobre donaciones."

"Cinco... ¿cuánto?"

"¡Sí! ¿Se refiere a los 5 mil millones y 34.1 millones de shillings?"

La expresión de Liliana se volvió seria ante la respuesta entusiasta del funcionario. No era para menos, enterarse de que se habían pagado impuestos que ella ni siquiera había cubierto era impactante. Incluso si fueran solo un millón de shillings, resultaría alarmante, pero una suma superior a cinco mil millones... naturalmente causaría pánico a cualquiera.

Liliana preguntó con urgencia al banquero: "¿Puedo saber el nombre de la persona que pagó los impuestos en mi nombre?"

Su corazón latía con tanta fuerza que sentía que le dolía. Esperó con ansiedad la respuesta del banquero, con el cuello tenso por la presión. Pero sucedió algo inesperado. La persona que había pagado los impuestos era alguien que jamás habría imaginado.

"...Aquí dice Vanessa Winder. Parece que Lady Winder se encargó del impuesto al emitir el cheque."

"¿Qué? ¿Lady Winder... lo hizo?"

"¡Sí! Eso es lo que indican los documentos."

El funcionario respondió alegremente una vez más, pero Liliana no escuchó nada. 'Espera, ¿eso significa que el dinero que Lady Winder me dio eran 10 mil millones después de impuestos, no antes de impuestos...?'

Mientras más alta era la suma de dinero involucrada, mayor era el porcentaje que se tomaba como impuesto por obsequio. Por eso, el impuesto que Liliana debía pagar superaba los cinco mil millones. Pero... ¡pero!

Ese costoso impuesto... ¿Fue pagado en silencio sin siquiera informarle? ¿Por esa infame Lady Winder, conocida por sus actos maliciosos?

¿Por qué demonios haría algo así…?

Una vez que surgió la pregunta, no pudo dejar de pensar en ello. Y poco después, Liliana comenzó a sospechar algo que jamás había considerado antes.

'¿Podría ser que Lady Winder en realidad no me odia? Tal vez…'

¿Tal vez quiere ayudarme?

El pensamiento tan absurdo hizo que las mejillas de Liliana se enrojecieran por un instante, pero pronto recobró la compostura. Porque, al pensarlo de nuevo, parecía bastante plausible. Había varias razones.

La primera era la suma total: 15 mil millones y 34.1 millones de shillings. Incluso para una familia adinerada como los Winder, eso era excesivo para una simple compensación por ruptura.

La segunda era el hecho de que los impuestos se habían pagado en secreto. Debió ser bastante molesto, pero aun así completó todo el proceso discretamente, sin alardear de ello.

Vieras como lo vieras, eso era un gesto increíblemente considerado, no algo que cualquiera haría fácilmente a menos que fuera realmente generoso.

La prueba final estaba en su propia mejilla.

Liliana observó sutilmente su reflejo en un pilar de hierro cercano. La mejilla que había sido golpeada con fuerza por Vanessa horas antes no mostraba signos de hinchazón, a pesar de haber sido golpeada con un cheque.

La razón era la compresa de hielo que se había aplicado justo después del golpe.

"Lady Winder insistió en que la usara."

No había pasado mucho desde el golpe. El sirviente de la familia Winder le había dicho eso al entregarle la compresa. Al principio pensó que era como dar medicina después de herir a alguien, pero ahora lo veía de otro modo.

'Debió preocuparse de que me quedara una cicatriz en el rostro.'

Si Vanessa realmente la odiara… Si la despreciara tanto como para no querer que se casara con su hijo...

'No le habría importado en absoluto si me quedaba una cicatriz o no.'

A medida que estos pensamientos se acumulaban, sus dudas se transformaron en convicción. '¿Tal vez Lady Winder no es realmente una villana, sino alguien que no sabe expresarse con sinceridad?'

Y aunque realmente fuera una villana, ¿qué importaba? Hay muchas personas en el mundo que, aunque parezcan amables en la superficie, no darían ni una moneda cuando realmente se necesita ayuda. La propia Liliana había sufrido mucho por culpa de gente así. Así que, aunque actuara con maldad, Liliana creía que una verdadera buena persona era quien ayuda cuando realmente importa.

En cualquier caso, lo único seguro era que, cualesquiera que fueran las intenciones de Vanessa, sus acciones habían beneficiado a Liliana. El matrimonio por contrato no deseado con Jeremyon, y las abrumadoras deudas familiares. Quien la había salvado de esos aprietos no era otra que la supuesta villana, Vanessa.

Por eso, Liliana comenzó a sentir curiosidad por Vanessa. Quería saber más sobre ella. Aun sabiendo que Vanessa era la madre de su futuro ex prometido, seguía sintiéndose así.

Y ese sentimiento... era más fuerte de lo que esperaba.

Había pasado más de un mes desde que le arrojé un fajo de cheques a Liliana, presionándola para que terminara la relación. Durante ese tiempo, me había encerrado en la mansión, esperando a que pusiera fin adecuadamente a su vínculo con Jeremyon.

'Con todo ya calmado, deberían haber terminado para ahora, ¿no?'

Un evento importante había ocurrido en el imperio durante el último mes: el fin de la guerra. La guerra prolongada entre el imperio y el Reino de Stell finalmente había terminado con la victoria del imperio. Este suceso era un punto clave en la historia original. Su hermano, con quien había perdido contacto, regresó después del final de la guerra.

Considerando que Liliana debía haber estado ocupada, decidí darle aproximadamente un mes. 'A estas alturas, ya debería haber resuelto todo.'

Ahora, era momento de comprobar si las cosas avanzaban como lo planeado. 'Por lo que se ve, Jeremyon ha salido menos últimamente, así que parece que sí terminaron. Pero no estaría mal confirmarlo una vez más.'

Así que el siguiente paso era... invitar a mi maleducado hijastro, Jeremyon Winder, a cenar.

"Jeremyon. Hace tiempo que no comemos juntos. Cuesta creer que vivimos en la misma mansión."

La persona que entró al comedor con el sonido de pasos fue Jeremyon. Lo saludé amablemente. Pero su reacción fue fría y hostil.

"No es como si estuviéramos en una situación que nos obligue a vernos seguido, ¿cierto?"

"¿Hmm? Si así te sientes, podrías haber rechazado mi invitación."

Mientras se sentaba, Jeremyon parecía rechinar los dientes de la rabia. El sonido era inquietantemente fuerte. 'Oh, querido, usar así los dientes te va a pasar factura cuando seas viejo.'

Quise regañarlo, pero sabía bien por qué Jeremyon actuaba así, así que me contuve. Era porque yo misma lo había obligado a aceptar la invitación para cenar. Al principio, Jeremyon, por supuesto, había rechazado mi propuesta. Pero utilicé mi habilidad especial, "Actuar como una villana", y lo arrastré aquí contra su voluntad.

Bueno, el proceso para traerlo no es lo importante. Lo importante era la conversación que íbamos a tener.

Después de un momento de silencio, los platos comenzaron a servirse uno a uno. Al mirar el rostro de Jeremyon, noté su boca apretada. Realmente parecía detestar la situación. 'No te preocupes, Jeremyon. Esto terminará pronto.'

Tomé un trozo de filete con el tenedor y hablé.

"Escuché rumores en la sociedad de que estás enamorado de Lady Locke. Es sorprendente oír hablar de amor viniendo de alguien tan frío como tú. ¿Cómo va eso?"

"Me encargaré yo mismo."

Su respuesta fue cortante, dejando claro que no pensaba compartir nada. Suspiré suavemente. 'Es difícil saber si terminaron o no.'

Pero tampoco esperaba que respondiera fácilmente preguntas personales. Me odiaba, después de todo. Yo era su madrastra. Pero eso no era un problema.

Provocar a alguien para que revelara sus verdaderos sentimientos era algo en lo que tenía bastante experiencia. Así que empecé a charlar, tal como había practicado.

"Deberías corregir tu actitud. Ser tan duro con tu propia madre... Así es como alejas a las mujeres."

"Estás extrañamente callado."

Su rostro estaba lleno de rabia y enojo contenido. 'Si todavía estuviera saliendo con Liliana, Jeremyon simplemente me ignoraría. Pero juzgando por esa expresión...'

Parecía que Liliana realmente había roto con él. Pero eso no era prueba suficiente. Necesitaba provocarlo más para conseguir una reacción definitiva.

Sonreí con picardía y puse la expresión que más odiaba. Luego dije, lenta y molesta:

"¿Será que... ya huyó? Lady Locke se mueve rápido, ¿no?"

En ese momento.

Jeremyon golpeó la mesa y se levantó de golpe. El sonido fue ensordecedor. Al mirarlo desde abajo, vi su expresión feroz, sus ojos negros como obsidiana mirándome con tanta furia que parecían capaces de congelarme en el acto.

Días de actualización: Martes, Miércoles y Jueves

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