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Renací Como Una Chica Dragón Con Un Sistema- Novela capítulo 24

Capítulo 24 - Trabajando en equipo con los humanos, tercera parte

Después de que todos se levantaran y comieran algo, se sentaron a esperar el regreso de Ray.

—¿Por qué tarda tanto? —Cecilie empezaba a impacientarse. Extrañamente, no estaba sentada junto a su equipo, sino junto a Kana. Parecía haber una ruptura entre ella y el grupo del que ahora había decidido marcharse.

—Oye, ¿ese humano va a volver o no? —preguntó Kana. Aunque tenía todo el tiempo del mundo, también se estaba hartando de esperar a ese hombre.

—Vámonos entonces. —Dijo de repente Thane, lo que a Cecilie le pareció extraño. Normalmente Thane nunca se iría sin Ray ya que se metería en problemas. Bueno, los padres de Thane acabarían metidos en problemas.

En un susurro bajo, tan bajo que sólo Kana podía oírlo, Cecilie hizo una advertencia:—Kana, mantén la guardia alta. No estoy segura de lo que está pasando, pero puede que estén tramando algo.

Kana miró a Cecilie y asintió levemente. Ella también sentía que algo iba mal. Lysairth también le estaba advirtiendo.

—Prepárate para matar a esos humanos. Tal y como dijo la chica Cecilie, tienes que tener cuidado. —Después de escuchar la historia de Cecilie, Lysairth tenía una mejor opinión de Cecilie. No era mucho, pero le bastaba para sentir que Cecilie no haría daño a Kana.

—Tendré cuidado. —Kana tenía la sensación de que Thane estaba ocultando algo por la forma en la que brillaban sus ojos.

—Dejaré una nota para que Ray nos alcance. Marcaremos los árboles para que no se pierda. ¿Todos de acuerdo? —preguntó Thane. Por supuesto, Isabella y Renne asintieron con la cabeza. Cecilie miró a Kana, que asintió, y sólo entonces asintió ella también—¡Bien, entonces salgamos!

Thane recogió su escudo del suelo, se lo echó a la espalda y enfundó su espada corta antes de caminar hacia el bosque. Renne e Isabella le siguieron. Cecilie, a diferencia de sus compañeras, ya tenía el arco preparado y una flecha clavada en la cuerda.

—Kana, recuerda que tienes que tener cuidado. Si alguno de ellos intenta algo, yo te cubriré...

—¿Estás segura de que puedes atacarlos? —preguntó Kana para ver si Cecilie dudaba en contestar o no.

—Ya lo he dicho antes, ¿verdad? Odio a los humanos. Así que mi respuesta es sí. —Dijo Cecilie con una sonrisa mientras seguía al resto.

Kana tarareó antes de seguir a Cecilie. Se preguntaba si, llegado el caso, Cecilie podría mantener su promesa. Si no lo hacía, no le importaría matarlos a todos. La propia Kana se sorprendió de que, al pensar en matar a un humano, no tuviera dudas ni sintiera asco. Pensó que no sería diferente de cuando mataba monstruos. De hecho, pensaba que los humanos eran más monstruosos que los monstruos. Entre lo que pasó en su vida pasada y la historia que Cecilie le contó. Pensaba que los monstruos eran mucho mejores.

El grupo se adentró en el bosque y rápidamente se encontraron con una manada de monos con púas. Estos monos estaban cubiertos de pelaje gris y parecían muy agradables, excepto porque les encantaba estar en las copas de los árboles arrancando las finas púas que les salían en sus espalda para lanzarlas a los que merodeaban por su territorio. Además, cada púa que arrancaban tardaba pocos minutos en volver a crecer, lo que los convertía en un enemigo difícil de combatir si estabas cuerpo a cuerpo.

—¡Cecilie, Renne, necesito que me cubran! — gritó Thane mientras corría hacia delante y gritaba su habilidad, llamada “Agroburla”, mientras clavaba su gran escudo en el suelo frente a él. Esta habilidad provocaba a todos los enemigos en un área de tres metros para que lo atacaran.

—¿Hmm? —Kana fue golpeada por la “Agroburla” de Thane y automáticamente sintió un profundo deseo de atacarlo—¿Acaso este humano quiere que le arranque el trasero a mordiscos? ¿O quiere que lo incendie? ¿Por qué demonios se burla de mí?

Cecilie sonrió irónicamente, dándose cuenta de que la habilidad de Thane también se había aplicado para Kana. se acercó y puso la mano en la cabeza de Kana y dijo:—Ignóralo. Su habilidad no funcionará con los monstruos que se limiten a ignorarla.

—Mmm... Luego le meteré fuego por el trasero. —Kana soltó un bufido antes de seguir hacia delante. Ya había luchado antes contra esos monos con púas y sabía que no podrían herirla con sus pinchos.

—¡Kana, cuidado! —gritó de repente Cecilie, haciendo que Kana se detuviera y viera cómo una bola de fuego pasaba disparada junto a su cabeza, estrellándose contra el suelo a un metro delante de ella.

Kana entrecerró los ojos y miró a Renne:—¿Qué diablos estás haciendo?

—Me he equivocado. Lo siento —Renne se disculpó, pero la sonrisa en su cara no demostraba que lo sintiera en absoluto.

—Ya veo... ¡Se acabaron los tratos! Los humanos pueden irse a la mierda. —dijo Kana, dándose la vuelta y empezando a caminar de vuelta hacia la entrada del bosque. Kana no era tonta. Renne le había apuntado. Incluso había disparado su bola de fuego perfectamente para que le diera si hubiera seguido corriendo hacia delante.

—Renne, ¿qué mierda estás haciendo? —gritó Thane mientras seguía bloqueando el ataque de los monos con púas.

Renne se rió mientras agitaba la mano. Detrás de ella, diez personas salieron de la maleza. A la cabeza iba Ray y el resto parecían ser soldados.

—Thane, ya puedes dejar de actuar. No tenemos motivos para seguir con esta farsa. Cecilie, mata a los monos. Luego capturaremos a este lagarto... no, me equivoco. Debería decir que capturaremos a esta dragona y la entregaremos por una gran recompensa.

—¡Eh! —Kana resopló y miró a los humanos. Ahora era una contra quince—Lysairth, ¿qué posibilidades tengo?

—Todos parecen estar en un nivel inferior. Incluso los soldados que trajeron sólo han evolucionado una vez. Aunque aún no hayas evolucionado, sigues siendo un dragón, lo que significa que eres equivalente a un humano de primer nivel de evolución. Si atacamos de forma inteligente, podremos eliminarlos a todos. Pero estoy cien por ciento segura de que podrás escapar ilesa tras romper su línea defensiva.

[Traducido por: Yves  ૮ ˙Ⱉ˙ ა ]

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