0%

Renací Como Una Chica Dragón Con Un Sistema- Novela capítulo 43

La princesa Tilia quedó sorprendida por el comentario de Cecilie. Pero sabía que no podía negar que su padre era un verdadero idiota.—Lo que dices es cierto. Es realmente un idiota manipulable...

—Mñam... La mayoría de los humanos son tontos... mñam mñam...— Dijo Kana. Había vuelto a comer su carne de conejo cuando vio a la princesa humana.

—Kana dijo la verdad. La mayoría de los humanos son tontos. Pero incluso si estás haciendo esto con buenas intenciones. Todavía no podemos confiar plenamente en ti. ¿Y si esto es sólo un truco para que te sigamos, y nos llevas a una trampa? —Cecilie no confiaba en nadie, y menos en un humano. Siempre había vivido su vida con cautela. Ahora con Kana a su lado, que era ingenua y fácil de engañar, tenía que estar más alerta.

—Kana, espero que estés escuchando la forma en que Cecilie está tratando esta situación. Así es como hay que actuar. No te limites a seguir a alguien si te promete comida o golosinas, ¿vale? —Lysairth sabía que el mayor punto débil de Kana era la comida y le preocupaba que pudiera seguir a alguien o hacer algo sólo por algo bueno para comer.

—Lo sé. No soy tonta. —Kana nunca seguiría a nadie que le ofreciera comida si no confiaba en él. Ya había aprendido de ese error una vez.

—Sólo quería asegurarme de que lo sabías. —Lysairth realmente no lo creía.

Kana se encorvó y siguió comiendo su conejo asado. Ya no le interesaba lo más mínimo lo que estaba pasando. Mientras, Cecilie y la princesa Tilia seguían hablando.

—Puedo jurar por mi título de princesa de Elurean que jamás haría algo así.

—De qué sirve jurar sobre un título que no significa nada a la hora de la verdad. Básicamente estás jurando por toda la gente que está cometiendo todos esos crímenes de los que hablas. Princesa, puede que seas joven, pero parece ser un poco inteligente así que  entiende que nosotros dos no vamos a encontrarnos nunca cara a cara a menos que ignores tu título y jures matar a todos los criminales de raza humana —Cecilie dijo rotundamente, sin rodeos—. Kana, ¿qué opinas?

Cecilie se giró para preguntarle a Kana, que ahora estaba profundamente dormida. Todavía tenía la cara manchada de grasa de sus conejos cornudos. Ver a Kana así hizo que Cecilie sacudiera la cabeza en señal de derrota.

—De todos modos, tienes que entender de dónde venimos. Sólo queremos dejar este reino sin problemas.

—Ya veo... Entonces sólo necesito renunciar a mi nombre y jurar matar a todos los humanos, ¡entonces bien! ¡De ahora en adelante ya no seré una princesa! ¡Sólo soy Tilia! ¡Y no llevaré nada que me convierta en miembro de la realeza! —La Princesa Tilia parecía haber perdido el control y comenzó a desnudarse.

—¡Espera, Princesa, por favor, no te quites la ropa! —Pepelt se escandalizó cuando la princesa empezó a quitarse la ropa. Se apresuró a apartar la mirada mientras sus mejillas se ponían de un rojo intenso.

—Princesa Tilia, sólo porque...

—¡A partir de ahora sólo Tilia! No deseo ser princesa si eso significa que me pongo del lado de todos aquellos que cometen crímenes! —dijo Tilia con toda justicia mientras se despojaba finalmente de su ropa interior, arrojando al río toda su lujosa vestimenta. Cecilie, que se había levantado para detenerla, se quedó sin habla. Nunca había esperado que una princesa de todas las personas fuera tan decidida en sus acciones.

—Yo em... Tilia... Entonces...

—¿Hmmm? —Kana abrió lentamente los ojos después de escuchar todo el alboroto y miró a la princesa ahora casi desnuda. Sus ojos se abrieron de par en par mientras se levantaba y gritaba: —¡Princesa, no es bueno ir por ese camino! Si te vendes así, ¡te arrepentirás el resto de tu vida!

Tanto la princesa como Cecilie miraron a Kana, intentando averiguar a qué se debía su arrebato. Pero al pensar en ello, sus rostros se enrojecieron. Cecilie y la princesa Tilia trataron rápidamente de explicar la situación.

—¡Kana, no es así!

—¡Sí, nunca lo haría!

—¿Hmm? ¿Entonces por qué estás desnuda? ¿Fetiche humano? —preguntó Kana, ladeando la cabeza.

—¡No! ¡Renuncié a mi derecho a ser princesa y me despojé de mis lujosas posesiones! Ahora sólo soy Tilia. —explicó la princesa Tilia.

—Tilia desnuda...— Murmuró Kana antes de encogerse de hombros y volver a tumbarse.

—Bueno... Tilia, antes de nada, vamos a ponerte ropa nueva. Hasta yo estoy un poco confusa sobre por qué te has desnudado... Pepelt, ¿puedes traerle algo de ropa? —Cecilie dejó escapar un largo suspiro. Estaba rezando para que Kana no le tomara cariño a esta princesa o podría tener que hacer de niñera de otra.

—¡Ahh, sí, claro! —Pepelt se levantó rápidamente y salió corriendo hacia su carrito. ¡Se alegró de que por fin alguien dijera algo!

Cecilie sacó una capa y la puso alrededor de Tilia, que temblaba visiblemente de frío.

—Tilia, ahora entiendo que realmente deseas hacer algo con respecto a la guerra que se avecina. He visto tu determinación. Me gustaría pensar que mi juicio sobre las personas es bueno. Cuando Kana esté completamente despierta, hablaremos una vez más, ya que no puedo tomar esta decisión sola. Pero debo advertirte que, a la primera señal de traición, te mataré.

[Traducido por: Yves  ૮ ˙Ⱉ˙ ა ]

◈❖◈

Si te gustó, Puedes apoyarnos aquí ~  [http://www.paypal.com/paypalme/MangoNovelas]

http://www.paypal.com/paypalme/MangoNovelas

También contamos con página de facebook ~ [https://www.facebook.com/MangoNovelas]

https://www.facebook.com/MangoNovelas

También visítanos en TikTok ~ [https://www.tiktok.com/@mangonovelas]

https://www.tiktok.com/@mangonovelas

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Inicio Detalle del manga